viernes, 7 de diciembre de 2007

Tipografía, los medios impresos y el barroco

La Tipografía



El origen de nuestros actuales alfabetos (sistemas de signos abstractos que representan sonidos articulados) hay que buscarlo en la remota antigüedad, en el primigenio el uso de signos y símbolos era para representar los elementos naturales y actividades cotidianas. El primer pictograma (dibujo representando un objeto o una idea sin que la pronunciación de tal objeto o idea sea tenida en cuenta) del que tenemos constancia se remonta al año 3.500 a.C., y es una tablilla en pieza caliza hallada en la ciudad de Kish (Babilonia).



Más tarde, los sumerios desarrollaron ideogramas (símbolos que representan ideas asociadas menos concretas), sistema que fue desarrollándose hasta dar lugar al sistema cuneiforme sumerio de escritura, basado en sílabas que imitaban el lenguaje hablado. Un ejemplo de escritura de este tipo es la tablilla hallada en Ur, fechada sobre el 2900-2600 a. C., que describe una entrega de cebada y comida a un templo.


La evolución posterior de este sistema silábico dio lugar a la escritura cuneiforme (2.800 a.C.), que utiliza lo que podemos considerar como el primer alfabeto, cuyas letras se imprimían sobre arcilla usando una cuña.


De esta época datan multitud de tablillas que contienen textos económicos, religiosos, poéticos, y legales, como el famoso código de Hammurabi, uno de los documentos jurídicos más antiguos que existen.

Sobre el año 1.500 a.C. se desarrollaron en Egipto tres alfabetos (jeroglífico, hierático y demótico). De ellos el jeroglífico (mixto ideográfico y consonántico), basado en 24 símbolos consonantes, era el más antiguo.



Los fenicios adoptaron este alfabeto egipcio 1.000 años antes de Cristo, usando para escribir pieles y tablillas enceradas, y también lo transmitieron por el mundo civilizado, de tal forma que poco después fue adoptado también por los hebreos y los arameos, sufriendo con el tiempo una evolución propia en cada un de estas culturas.

El alfabeto fenicio fue también adoptado por etruscos y griegos, y de ellos lo fue por los romanos, que en el siglo I ya manejaban un alfabeto idéntico al actual, a falta de la J, la W y la V. El Imperio Romano fue decisivo en el desarrollo del alfabeto occidental, por crear un alfabeto formal realmente avanzado, y por dar la adecuada difusión a este alfabeto por toda Europa conquistada, ya que muchas lenguas que no tenían sistema propio de escritura adoptaron el alfabeto romano o latino.

La escritura romana adoptó tres estilos fundamentales: Quadrata (mayúsculas cuadradas romanas, originalmente cinceladas en piedra), Rústica (versiones menos formales y más rápidas en su ejecución) y Cursiva (modalidades de inclinación de las mayúsculas). Partiendo del modelo fenicio-nabateo se desarrolló también, alrededor del siglo IV d. C, el alfabeto árabe, formado por 28 consonantes y en el que, al igual que el resto de alfabetos semíticos, se escribe sin vocales, de derecha a izquierda.

En occidente el alfabeto romano fue evolucionando y, en el siglo X, en el monasterio de St. Gall, en Suiza, se desarrolló un nuevo tipo de letra comprimida y angulosa, la letra gótica, más rápida de escribir y que aprovechaba mejor el papel, factores importantes en un momento que la demanda de escritos se había incrementado notablemente, escritos que se realizaban a mano, primeramente en pergaminos y luego, a partir del año 1.100, en papel. La letra gótica se difundió por toda Europa, surgiendo diferentes variantes (Textura, Littera Moderna, Littera Antiqua, Minúscula de Niccoli,, etc.). En 1.450 se produjo uno de los hechos más importantes para el desarrollo de la Tipografía y de la cultura humana: Johann Gutenberg (1398 – 1468) inventa a la vez los caracteres móviles y la prensa, creando la imprenta. El primer texto occidental impreso, la "Biblia de 42 líneas" de Mazarino, sale en 1.456, al parecer de la imprenta de Gutenberg.

El trabajo de impresión posibilitó el uso de nuevos tipos de letra. En 1470 Nicolas Jenson graba el primer tipo en estilo romano inspirándose en las Quadratas romanas, en 1.495 Francesco Griffo diseña el tipo conocido como Bembo, en 1.501 Francesco de Bolonia diseña para el veneciano Aldo Manucio el primer tipo mecánico cursivo y en 1.545 el impresor francés Claude Garamond crea una fundición y comienza a fundir un tipo más informal que la letra romana trajana, basado en el trazo de la pluma de ave. Desde entonces, multitud de tipógrafos aportaron su granito de arena a la creación de nuevas fuentes, entre los que destacan Alberto Durero, Giambattista Bodoni, Fournier, Didot, Caslon, Baskerville, Bodoni y, ya en el siglo XX, Max Meidinger (creador de la fuente Helvetica en 1.957), Cooperplate y Novarese.






Las Familias Tipografícas



Una familia tipográfica es un grupo de signos escriturales que comparten rasgos de diseño comunes, conformando todas ellas una unidad tipográfica. Los miembros de una familia (los tipos) se parecen entre si, pero también tienen rasgos propios. Las familias tipográficas también son conocidas con el nombre de familias de fuentes (del francés antiguo fondre, correspondiente en español a derretir o verter, refiriéndose al tipo hecho de metal fundido). Una fuente puede ser metal, película fotográfica, o medio electrónico. Existen multitud de familias tipográficas. Algunas de ellas tienen más de quinientos años, otras surgieron en la gran explosión creativa de los siglos XIX y XX, otras son el resultado de la aplicación de los ordenadores a la imprenta y al diseño gráfico digital y otras han sido creadas explícitamente para su presentación en la pantalla de los monitores, impulsadas en gran parte por la web. Unas y otras conviven y son usadas sin establecer diferencias de tiempo, por lo que es necesario establecer una clasificación que nos permita agrupar aquellas fuentes que tienen características similares. Son muchos los intentos por lograr agrupar las formas tipográficas en conjuntos que reúnan ciertas condiciones de igualdad. Generalmente están basados en la fecha de creación, en sus orígenes dentro de las vertientes artísticas por las que fueron influenciadas o en criterios morfológicos.



Los sistemas de clasificación de fuentes más aceptados es el de Maximilien Vox (1954) que divide las familias en:
Humanas
Garaldas
Reales
Didonas
Mecanos
Lineales
Incisas
Scriptas
Manuales



La clasificación de Robert Bringhurst Divide las fuentes en:
Renacentistas
Barrocas
Neoclásicas
Románticas
Realistas
Modernistas geométricas
Modernistas líricas
Posmodernistas



Clasificaciones ATypI La ATYPI (Asociación Tipográfica Internacional), con objeto de establecer una clasificación general de las familias tipográficas, realizó en 1964 una adaptación de la clasificación de Maximilien Vox, conocida comoVOX-ATypI.

Esta clasificación está relacionada también con la evolución de las familias tipográficas a lo largo de la historia, aunque modifica ciertos elementos de la clasificación de VOX..

Otra clasificación de fuentes de la ATypI, evolución de la anterior, es la basada en la agrupación de fuentes por características comunes, normalizada con el nombre DIN 16518. Divide las familias tipográficas en los siguientes grupos:


Romanas Formado por fuentes que muestran influencias de la escritura manual, en concreto de la caligrafía humanista del s. XV, y también de la tradición lapidaria romana, donde los pies de las letras se tallaban para evitar que la piedra saltase en los ángulos. Las fuentes Romanas son regulares, tienen una gran armonía de proporciones, presentan un fuerte contraste entre elementos rectos y curvos y sus remates les proporcionan un alto grado de legibilidad.


Las Romanas se dividen cinco grupos fundamentales:

Antiguas: también llamadas Garaldas (por Garamond), aparecen a fines del siglo XVI en Francia, a partir de los grabados de Grifo para Aldo Manuzio. Se caracterizan por la desigualdad de espesor en el asta dentro de una misma letra, por la modulación de la misma y por la forma triangular y cóncava del remate, con discretas puntas cuadradas. Su contraste es sutil, su modulación pronunciada, cercana a la caligrafía, y su trazo presenta un mediano contraste entre finos y gruesos. Entre ellas destacan las fuentes Garamond, Caslon, Century Oldstyle, Goudy, Times New Roman y Palatino.


De Transición: se manifiestan en el siglo XVIII y muestran la transición entre los tipos romanos antiguos y los modernos, con marcada tendencia a modular más las astas y a contrastarlas con los remates, que dejan la forma triangular para adoptar la cóncava o la horizontal, presentando una gran variación entre trazos. Esta evolución se verificó, principalmente, a finales del siglo XVII y hasta mediados del XVIII, por obra de Grandjean, Fournier y Baskerville. Ejemplos de este grupo son las fuentes Baskerville y Caledonia.


Modernas: aparecen a mediados del siglo XVIII, creadas por Didot, reflejando las mejoras de la imprenta. Su característica principal es el acentuado y abrupto contraste de trazos y remates rectos, lo que origina fuentes elegantes a la vez que frías. Sus caracteres son rígidos y armoniosos, con remates finos y rectos, siempre del mismo grueso, con el asta muy contrastada y con una marcada y rígida modulación vertical. Resultan imponentes a cuerpos grandes, pero acusan cierta falta de legibilidad al romperse los ojos del carácter, al componerse a cuerpos pequeños y en bloques de texto corrido. Ejemplos destacables podrían ser Firmin Didot, Bodoni, Fenice y Modern Nº 20.


Mecanos: son un grupo aislado que no guarda ninguna semejanza constructiva con el resto de los tipos romanos con remate, tan solo el hecho de poseer asiento sus caracteres. No tienen modulación ni contraste. Entre sus fuentes podemos destacar Lubalin y Stymie.



Incisas: otro grupo aislado dentro de las romanas, al igual que las mecanos, son letras en la tradición romana más antigua, ligeramente contrastadas y de rasgo adelgazado ahusado. No se puede hablar de remates, pero sus pies abocinados sugieren, tal como ocurre con las serif, una línea imaginaria de lectura. Su ojo grande y sus ascendentes y descendentes finos, hacen de él un tipo que, aunque es extremadamente difícil de digitalizar, es muy legible a cualquier cuerpo. A pequeña escala, puede confundir y parecer de palo seco al perderse la gracia de su rasgo. Como ejemplos podemos citar las fuentes Alinea y Baltra.


Palo Seco Las fuentes Palo Seco se caracterizan por reducir los caracteres a su esquema esencial. Las mayúsculas se vuelven a las formas fenicias y griegas y las minúsculas están conformadas a base de líneas rectas y círculos unidos, reflejando la época en la que nacen, la industrialización y el funcionalismo.

También denominadas Góticas, Egipcias, Sans Serif o Grotescas,
de dividen en dos grupos principales:



Lineales sin modulación: formadas por tipos de un grosor de trazo uniforme, sin contraste ni modulación, siendo su esencia geométrica. Admiten familias larguísimas, con numerosas variantes, aunque su legibilidad suele ser mala en texto corrido. Ejemplos de este tipo serían Futura, Avant Garde, Eras, Helvética, Kabel y Univers.



Grotescas: caracterizadas porque el grosor del trazo y el contraste son poco perceptibles y por ser muy legibles en texto corrido. La principal fuente de este tipo es Gill Sans.



Rotuladas Las fuentes rotuladas advierten más o menos claramente el instrumento y la mano que los creó, y la tradición caligráfica o cursiva en la que se inspiró el creador.



Existen tres grupos principales de fuentes rotuladas:




Caligráficas: aglutina familias generadas con las influencias más diversas (rústica romana, minúscula carolingia, letra inglesa, caracteres unciales y semiunciales), basadas todas ellas en la mano que las creó. Con el tiempo la escritura caligráfica se hizo cada vez más decorativa. En la actualidad se utiliza en invitaciones a ceremonias o determinados acontecimientos. Como ejemplos de este tipo podemos citar las fuentes American Uncial, Commercial Script, Cancelleresca Seript, Bible Seript Flourishes, Zapf Chancery, Young Baroque.


Góticas: de estructura densa, composición apretada y verticalidad acentuada, manchan extraordinariamente la página. Además, no existe conexión entre letras, lo que acentúa más su ilegibilidad. Ejemplos de este tipo son Fraktur, Old English, Koch Fraktur, Wedding Text, Forte Grotisch.


Cursivas: suelen reproducir escrituras de mano informales, más o menos libres. Estuvieron muy de moda en los años 50 y 60, y actualmente se detecta cierto resurgimiento. Ejemplos: Brush, Kauffman, Balloon, Mistral, Murray Hill, Chalk Line y Freestyle Script.
Decorativas Estas fuentes no fueron concebidas como tipos de texto, sino para un uso esporádico y aislado.



Existen numerosas variaciones, pero podemos distinguir dos grupos principales:

Fantasía: similares en cierto modo a las letras capitulares iluminadas medievales, resultan por lo general poco legibles, por lo que no se adecuan en la composición de texto y su utilización se circunscribe a titulares cortos. Ejemplos de este tipo son las fuentes Bombere, Block-Up, Buster, Croissant, Neon y Shatter.


Época: pretenden sugerir una época, una moda o una cultura, procediendo de movimientos como la Bauhaus o el Art Decó. Anteponen la función a lo formal, con trazos sencillos y equilibrados, casi siempre uniformes. Muy utilizados en la realización de rótulos de señalización de edificios y anuncios exteriores de tiendas. Ejemplos de este grupo son Futura, Kabel, Caslon Antique, Broadway, Peignot, Cabarga Cursiva, Data 70, LCD, Gallia.



Variantes de una familia Dentro de cada familia



las variables tipográficas permiten obtener diferentes soluciones de color y ritmo. Las variables constituyen alfabetos alternativos dentro de la misma familia, manteniendo un criterio de diseño que las "emparenta" entre sí.


Las variaciones de una fuente se obtienen modificando propiedades como:

El cuerpo o tamaño: mayúsculas, minúsculas y capitales.


El grosor del trazado: ultrafina, fina, book, redonda, media, seminegra, negra y ultranegra.


La inclinación de los ejes: redonda, cursiva e inclinada.


La proporción de los ejes: condensada, comprimida, estrecha, redonda, ancha, ensanchada y expandida.


La forma del trazado: perfilada, sombreada, etc.
Otras variantes de una fuente incluyen versalitas, números, números antiguos, símbolos de puntuación, monetarios, matemáticos y misceláneos, etc.
Algunas familias poseen muchas variaciones, otras sólo unas pocas o ninguna, y cada variación tiene un uso y una tradición, que debemos reconocer y respetar.





La Evolución de los Medios Impresos



Al lado: foto que respresenta la gran variedad de medios de
comunicación como por ejemplo: las revistas y los periodicos.





Los medios impresos de comunicación son muy antiguos, los pueblos de la antigüedad dejaban constancia de su vida y costumbres utilizando papiros, códices, pinturas, estelas jeroglíficas.


Con la invención del alfabeto, aprender a leer y escribir fue más fácil y la comunicación impresa estuvo al alcance de más personas. La introducción de la imprenta la producción de libros se multiplico. En Alemania, más de 150 años después apareció por primera vez un diario.Los diarios circulan todos los días, en ellos podemos encontrar información de todo tipo, desde política hasta deportes, pasando por economía, espectáculos, viajes, gastronomía, cultura.



Las revistas, en tanto tienen una circulación semanal, quincenal o mensual, según sea el caso, existen revistas especializadas en los múltiples aconteceres de la vida nacional e internacional como la moda, política, deportes, cultura, cine, etc.



Desarrollo de las innovaciones más importantes que han ayudado al desarrollo de los medios impresos:


3500 a.C. - Pictogramas en tablillas de barro se utilizaban en Sumeria para describir eventos.
1500 a.C. - Alfabeto fenicio.
1270 a.C. - Un erudito sirio recopila la primera enciclopedia.
775 a.C. - Alfabeto fonético griego escrito de izquierda a derecha.
500 a.C. - Precursor del telégrafo desarrollado en Grecia. Se utilizaban trompetas, tambores y humo como señales de mensajes.- Precursor del Pony Express en pleno uso en Persia.- Pluma y tinta son utilizados por eruditos chinos.
100 d.C. - Correo gubernamental romano es distribuido en todo el imperio por "couriers".
105 d.C. - T'sai Lun inventa el papel.
450 d.C. - En China se utiliza la tinta en los sellos estampados en papel (desarrollo de la impresión).
600 d.C. - Se imprimen libros en China.
950 d.C. - Libros plegables aparecen en China en lugar de los rollos.
1035 - Papel desechado es utilizado para fabricar nuevo papel en Japón (primer reciclaje conocido).
1049 - Pi Sheng fabrica el tipo móviles utilizando arcilla.
1241- Letras o tipos de metal se inventan en Corea.
1392 - Se utiliza la fundición para hacer caracteres de bronce en Corea.
1423 - Los europeos comienzan a utilizar el método chino de impresión en bloque.
1450 - Panfletos noticiosos comienzan a circular en Europa.
1451 - Johannes Gutemberg utiliza una prensa para imprimir un viejo poema alemán.
1452 - Se utilizan platos de metal en la impresión.
1453 - Gutemberg imprime la Biblia de 42 líneas en cada página.
1490 - Impresión de libros en papel se hace más común en Europa.
1500 - 10 millones de copias de 35 mil libros han sido impresos en Europa.
1609 - Aparece en Alemania el primer periódico regularmente impreso.
1631 - Los periódicos franceses incluyen anuncios clasificados.
1689 - Los periódicos se imprimen como hojas desplegables
1833 - El profesor de matemáticas de la Universidad de Cambridge Charles Babbage (1792-1871) ideó la primera máquina procesadora de información. Algo así como la primera computadora mecánica programable. Pese a que dedicó casi cuarenta años a su construcción, murió sin terminar su proyecto.
1886 - La máquina linotipia se inventa para imprimir tipos.
1890 - Los cartones perforados y un primitivo aparato eléctrico se usaron para clasificar por sexo, edad y origen a la población de Estados Unidos. Esta máquina del censo fue facilitada por el ingeniero Herman Hollerith, cuya compañía posteriormente se fusionó (1924) con una pequeña empresa de Nueva York, creando la International Business Machines (IBM), empresa que un siglo más tarde revolucionó el mercado con los computadores personales o PC.
1892 - Imprenta rotativa de cuatro colores.- Máquinas de escribir portátiles.
1901 - Primera máquina de escribir eléctrica, la Blickensderfer
1941- Konrad Suze presentó el Z3, el primer computador electromagnético programable mediante una cinta perforada.
1944 - En 1939, Howard Aiken (1900-1973), graduado de física de la Universidad de Harvard, logró un convenio entre dicha universidad e IBM, por el que un grupo de graduados inició el diseño y la construcción del primer computador americano, del tipo electromecánico -basado en electroimanes. El Mark I comenzó a funcionar en 1944.
1971 -Intel construye el microprocesador, "una computadora en un chip".
1981- IBM lanzó al mercado el IBM PC, diseñado por doce ingenieros dirigidos por William C. Lowe.





El Jardin Barroco Francés

Escenario del poder y la visión de la naturaleza


Arriba: muestra fotográfica de un jardin al estilo barroco
En un clima en el que aún están presentes la idea de indiferenciación entre arte y naturaleza, la visión mágica del universo -inspirada en ideas neoplatónicas y cultivada por la cultura hermética del siglo XVI- y el carácter lúdico del Manierismo, surge en la Europa del siglo XVII una concepción renovada del mundo que se manifiesta en el desarrollo del teatro como expresión ilusionista de lo sobrenatural y, con especial plenitud, en el jardín barroco francés. Desde esta nueva perspectiva se promueven la apreciación científica y el carácter solemne del universo a través de la vindicación del poder del artificio sobre la naturaleza, esto es, del poder de la razón y del orden sobre lo aparentemente irracional y desordenado.
Cabe mencionar que, en estas fiestas cortesanas, las mascaradas y demás representaciones teatrales juegan un papel fundamental en la impresión del público; de allí que se establezcan escenarios fijos dentro de los jardines barrocos (que tiempo después son sustituidos por teatros cerrados a los que se asocian las cortes en busca de innovadores efectos lumínicos). En general, durante esta época, movido por las mismas ideas de la retórica y el espectáculo, el arte de la jardinería mantiene una relación tan estrecha con al arte escénico que resulta directamente enriquecido por elementos propios del montaje teatral, tales como las perspectivas pintadas y los arcos de triunfo.
La función simbólica del jardín barroco francés resulta obvia antes de que éste acoja a las representaciones teatrales y funcione como escenario de fiestas. El diseño arquitectónico propiamente dicho, sobre todo en los jardines de André Le Nôtre -los del Palacio de Versalles y los del Castillo Vaux-le-Vicomte- muestra claramente cómo, a través de la subordinación de la naturaleza al artificio, el espacio se transforma en imagen del poder de la razón y, más específicamente, de la omnipotencia monárquica. En este sentido, la geometría implacable en la organización de los elementos del jardín es verdaderamente reveladora. Aguas, plantas y objetos de especial importancia -como estatuas- se distribuyen en función de la armonía -volumétrica y cromática- y unificación de un plano visual concebido de acuerdo a la perspectiva se tiene desde el punto central reservado para el palacio. De esta manera, los jardines se convierten en la expresión de un mundo cuyo espacio privilegiado está ocupado por la monarquía, cuyo orden -contrapuesto al desorden exterior de la forma azarosa de la naturaleza- está dictaminado por ella, y sobre el cual el rey tiene completa visibilidad, metáfora del dominio absoluto.
La ciencia, merece especial mención el recurso de la perspectiva ya que, aparte de proveer la unificación visual del jardín, permite jerarquizar los elementos dentro del espacio de acuerdo a su cercanía con el eje central, esto es, crear un orden aún más detallado dentro del universo regido por la monarquía, ofrecer una visión más precisa del nivel jerárquico del rey y los miembros de la corte con respecto al resto de la sociedad. Además, la perspectiva colabora al simbolismo del jardín en tanto crea la ilusión de infinitud de su terreno que, desprovisto de elementos demarcadores de fronteras, representa así el poder ilimitado de monarca.

Es importante notar cómo las condiciones naturales están supeditadas a un plan teórico ideal. Así como en ocasiones se aprovecha la elevación topográfica original del área que ha de ocupar el palacio, para privilegiar aún más la posición monárquica, otras veces se transforma por completo un suelo infértil, se regulariza el curso de un río o se allana el terreno para hacerlo parecer infinito y así elaborar a la perfección una metáfora del poder absolutista.Tambien persiste en el jardín barroco francés un cierto sentido lúdico. Por ello, algunas áreas marginadas respecto al centro palaciego obedecen a funciones no oficiales, tales como el retiro del rey, y se muestran desobedientes al lenguaje formal propio de la visión ordenada de la naturaleza y del simbolismo del poder. En cierto sentido, puede considerarse lúdica la continua transformación y ampliación de parques como los de Versalles: la desaparición de elementos no transformables, la presencia efímera de escenarios para fiestas y representaciones teatrales y la renovación periódica de esculturas, flores y agua de las fuentes, entre otras.

Tras la popularización temporal del jardín a la francesa en gran parte de Europa, la adopción del Rococó (promovida por el rechazo del racionalismo y la necesidad de intimidad y misterio poético) puede ser comprendida como la consecuencia natural de un proceso que cultivó la autoridad del artificio.
Al lado: El columpio, obra mestra de Fragonard, donde se recoge el espíritu refinado, exótico y sensual propio del Rococó.


El Rococó







Es un movimiento artístico nacido en Francia, que se desarrolla de forma progresiva entre los años 1730 y 1760. El Rococó se define por el gusto por los colores luminosos, suaves y claros. Predominan las formas inspiradas en la naturaleza, en la mitología, en la belleza de los cuerpos desnudos, en el arte oriental y especialmente en los temas galantes y amorosos. Es un arte básicamente mundano, sin influencias religiosas, que trata temas de la vida diaria y de las relaciones humanas. Es un estilo que busca reflejar lo que es agradable, refinado, exótico y sensual.
Del Barroco al Rococó

Durante el reinado de Luis XV la vida de la corte se aleja del palacio de Versalles, extendiendo el cambio artístico del palacio real y permiten su difusión a toda la alta sociedad francesa. La delicadeza y la alegría de los motivos Rococó han sido vistos a menudo como una reacción a los excesos del régimen de Luis XIV. Si lo Barroco estaba al servicio del poder absolutista, el Rococó está al servicio de la aristocracia y la burguesía. El artista deja de ser un servidor del poder y trabaja con más libertad y se inicia el mercado del arte. El Rococó se presenta como un arte al servicio de la comodidad, el lujo y la fiesta. Las escenas de su pintura recogen este nuevo estilo de vida y la arquitectura se transforma y se modifica la forma de vivir.
Con respecto a la vertiente social, se inicia un cambio en el papel de la mujer, que se convierte en organizadora de reuniones para hablar de literatura, política, juegos de ingenio o para bailar. Este entorno de alta actividad social dentro la alta burguesía, es el lugar adecuado para que los artistas se promocionen y hagan clientes. Los motivos del Rococó buscan reproducir el sentimiento típico de la vida aristocrática, libre de preocupaciones, o de novela ligera, más que batallas heroicas o figuras religiosas.
Declive
El fin del Rococó se inicia en torno al 1760 cuando personajes del nivel de Voltaire y Jacques-François Blondel extienden la crítica sobre la superficialidad y la degeneración del arte. Blondel, en particular, se lamentó de la increíble mezcla de cochas, dragones, cañas, palmas y plantas del arte contemporáneo. En 1780 lo Rococó deja de estar de moda en Francia y es reemplazado por el orden y la seriedad del estilo Neoclásico impulsado por Jacques-Louis David.
El Rococó se mantuvo popular fuera de las grandes capitales y en Italia hasta la segunda fase del Neoclásico, cuando el llamado estilo Imperio se impone gracias al impulso del gobierno napoleónico. Un renovado interés por el Rococó aparece entre 1820 y 1870. Inglaterra es la primera en revalorar el estilo Luis XIV, que es como se denominaba erróneamente al comienzo. Con esta moda, se llegaron a pagar cifras importantes para comprar objetos Rococó de segunda mano que se podían encontrar en París. En Francia, sólo artistas importantes cómo Delacroix y mecenas como la emperatriz Eugenia redescubren el valor de la gracia y de la ligereza aplicada al arte y al diseño.


Mobiliario y objetos decorativos durante el periodo Rococó
La temática ligera pero intrincada del diseño Rococó se adecúa mejor a los objetos de talla reducida que a la arquitectura y a la escultura. No sorprende por lo tanto que el Rococó francés fuera utilizado, sobre todo en el interior de las casas. Figuras de porcelana, platería y, sobre todo, el mobiliario incorporan la estética del Rococó cuando la alta sociedad francesa quiere arreglar las casas con el nuevo estilo.
El Rococó aprecia el carácter exótico del el arte chino y, en Francia, se imita este estilo en la producción de porcelana y vajilla de mesa. Los diseñadores franceses como François de Cuvilliés y Nicholas Pineau exportan el estilo a Múnich y a San Petersburgo, mientras el alemán Juste-Aurèle Meissonier se trasladó a París, si bien hace falta considerar a Simon-Philippenis Poirier como el precursor del Rococó en París. El Rococó inglés tiende a ser más moderado. El diseñador de muebles Thomas Chippendale mantiene la línea curva pero menos ampulosa que la del mueble francés. El mayor exponente del Rococó inglés fue, probablemente, Thomas Johnson, un escultor y proyectista de muebles ubicado en Londres a mediados del 1700.
Arquitectura
Una de las características del estilo Rococó será la marcada diferencia entre exteriores e interiores. El interior será un lugar de fantasía y colorido mientras la fachada se caracterizará por la sencillez y la simplicidad. Se abandonan los órdenes clásicos y las fachadas de los edificios se distinguirán por ser lisas, teniendo, como mucho, unas molduras para separar plantas o enmarcar puertas y ventanas. La forma dominante en las edificaciones rococós era la circular. Un pabellón central, generalmente entre dos alas bajas y curvas y, siempre que era posible, rodeado de un jardín o un inmerso parque natural. Otras edificaciones podían tomar la forma de pabellones encadenados, en contra del típico edificio «bloque», propio de la etapa anterior.
En este momento la ventana aumenta progresivamente de medida, hasta la puerta-ventana o «ventana-francesa», obteniendo una interrelación entre interior y exterior que consigue la ideal fusión con la naturaleza, con el paisaje y el entorno. Se descartan los marcos en ángulo recto, demasiado rígidos y se adoptan ventanas arqueadas. Se elimina o reduce el uso de esculturas monumentales, limitándolas a la ornamentación de los jardines.
En cualquier caso, el aspecto más destacable de los interiores rococós es la distribución interna. Los edificios tienen estancas especializadas para cada función y una distribución muy cómoda. Las habitaciones se diseñan como un conjunto que, con una marcada funcionalidad, combinan la ornamentación, colores y mobiliario.
Por su misma naturaleza, estas tendencias arquitectónicas tuvieron muy poco reflejo en las construcciones oficiales, fueran laicas o eclesiásticas. En cambio, el nuevo estilo fue perfecto para las residencias de la nobleza y la alta burguesía, las clases más ansiosas de cambiar según los nuevos cánones y las más dotadas de medios económicos para conseguirlo.
Pintura
A pesar de que el Rococó debe de su origen puramente a las artes decorativas, el estilo mostró su influencia también en la pintura, llegando a su máximo esplendor en la década de 1730. Esta pintura debe llamarse propiamente como Pintura Galante y no como Pintura Rococó, pues este término engloba el contexto estético en que se encontraba. Los pintores usaron colores claros y delicados y las formas curvilíneas, decoran las telas con querubines y mitos de amor. Sus paisajes con fiestas galantes y pastorales a menudo recogían comidas sobre la hierba de personajes aristocráticos y aventuras amorosas y cortesanas. Se recuperaron personajes mitológicos que se entremezclan en las escenas, dotándolas de sensualidad, alegría y frescura.
El
retrato también fue popular entre los pintores rococós, en el que los personajes son representados con mucha elegancia, basada en la artificialidad de la vida de palacio y de los ambientes cortesanos, reflejando una imagen amable de la sociedad en transformación.
Escultura

La escultura es otra área en la cual intervinieron los artistas rococó. Es considerado uno de los mejores representantes del rococó francés. En general, este estilo fue expresado mejor mediante la delicada escultura de porcelana, más que con estatuas marmóreas e imponentes. El mismo Falconet era director de una famosa fabrica de porcelana en Sèvres. Los motivos amorosos y alegres son representados en la escultura, así como la naturaleza y la línea curva y asimétrica. El diseñador Edmé Bouchardon representó a Cupido ocupado tallando sus dardos de amor con el garrote de Hércules, un símbolo excelente del estilo Rococó. El semidiós es transformado en un niño tierno, el garrote que rompe huesos se transforma en flechas que golpean el corazón, en el momento en que el mármol es sustituido por el estuco. En este periodo podemos mencionar a los escultores franceses, Jean-Baptiste Lemoyne, Robert le Lorrain, Michel Clodion y Pigalle.

Música

El estilo galante fue el equivalente del Rococó en la historia de la música, situado entre la música barroca y la música clásica, y no es fácil definir este concepto con palabras. La música rococó se desarrolló al margen de la música barroca, particularmente en Francia. Puede ser considerada como una música muy intimista realizada de forma extremadamente refinada. Entre los máximos exponentes de esta corriente se puede citar a Jean Philippe Rameau y Carl Philipp Emanuel Bach.

Mobiliario barroco y rococo






Mobiliarios Barroco


El diseño barroco es más evidente en el mobiliario de finales del siglo XVII, varias décadas después de que los arquitectos barrocos italianos Gian Lorenzo Bernini y Francesco Borromini introdujeran sus innovadores enfoques en Roma. Durante la primera parte del siglo, el nuevo estilo tuvo influencia en las superficies, pero no en las formas. Sin embargo, en el último cuarto de siglo, se produjeron numerosas novedades.



A finales del siglo XVII, se empezaron a utilizar frontales curvados en piezas grandes, como armarios y cómodas con cajones, que reflejaban la nueva arquitectura barroca. Destacan la fabricación de escritorios de influencia italiana, los cabinets. En las sillas, se pusieron de moda los tallados elaborados y los respaldos altos. Tanto las piezas inglesas como las continentales se realizaban con asientos y respaldos de rejilla como alternativa a la tapicería. También se realizaron sencillas variaciones de estas sillas con partes torneadas en lugar de talladas, pero se seguían utilizando los respaldos altos.




Mobiliario francés.



El mobiliario más elegante y elaborado del barroco se realizó para la corte de Luis XIV, en Francia. El excelente artesano André Charles Boulle creó formas y detalles inusuales con taraceas que combinaban metal (peltre, oro, bronce o plata), carey y ébano en diseños que formaban yuxtaposiciones imaginativas de motivos clásicos: parecía como si la inspiración básica fueran antiguos frescos romanos. Las patas con forma de columnas, ricamente adornadas, se utilizaron para sostener mesas, sillas y arcones.




Mobiliario Rococó.




El estilo barroco perduró muchos años hasta que las modas empezaron a cambiar, primero en París y después en el resto del mundo occidental, hacia 1730. El estilo que tomó su lugar fue el rococó, que perseguía una mayor delicadeza en la escala de los objetos y una conexión más íntima entre los muebles y las personas. Los ornamentos arquitectónicos tenían menos importancia y los muebles se construían según el gusto y comodidad de las personas, no de las habitaciones.




Rococó francés.



Los orígenes franceses tuvieron una gran importancia e influencia y sus resultados fueron muy importantes. El rococó comenzó durante el reinado de Luis XIV y floreció en el de Luis XV. La versión francesa de este estilo abarcaba ambiciosos diseños con gran variedad de materiales que requerían una gran destreza para construirlos. Se caracterizaban por formas complejas y sinuosas que se curvaban en todas direcciones. Motivos imaginativos se incrustaban en capas chapadas que, a su vez, estaban rodeadas de oro molido (bronce dorado) que resaltaba las patas, orillas y frentes de los cajones de una sola pieza. Las patas con forma de columnas fueron sustituidas por formas de animales con una gran variedad de curvaturas.




Mobiliario Rococó inglés.




El rococó inglés fue mucho más sobrio. Las incrustaciones se utilizaron muy poco debido a que los ebanistas preferían usar madera fina de nogal y caoba, que se trabajaba con mucha destreza, para sacar el máximo partido a las vetas. Los diseñadores ingleses —y sus seguidores— introdujeron las patas en forma de S con pies de garra y bola para las sillas, mesas y cómodas. Este pie estaba inspirado en la misma forma de los bronces chinos (pero que no se encontraba en el mobiliario) y representa la popularización del diseño oriental. Hacia el final del periodo rococó en Inglaterra, el ebanista londinense Thomas Chippendale publicó un libro de diseños, The Gentleman and Cabinet Maker’s Directory (1754), en el que presentaba la interpretación inglesa del estilo rococó. Fue el primero en categorizar las variedades del rococó como francés, chino o gótico y ofrecer ejemplos de cada una. Los innovadores diseños franceses de la década de 1750 fueron traducidos por Chippendale a diseños muy elaborados, sin utilizar oro molido ni taraceas como hacían los franceses. El elemento del estilo rococó más subrayado por Chippendale y por la mayoría de los artesanos ingleses fue su aire de capricho, inspirado en los diseños franceses por la utilización nueva de los motivos clásicos. En su libro, se podían observar diseños chinos y góticos como formas adicionales para conseguir ese aire. Estos diseños eran más fáciles de realizar que los que seguían las pautas francesas.Los diseñadores ingleses de este periodo (entre 1740 y 1760) solían trabajar a pequeña escala; algunos eligieron continuar con los diseños clásicos y otro grupo más numeroso se decantó por un estilo arquitectónico denominado palladiano; estos artesanos modificaron los diseños renacentistas del arquitecto italiano del siglo XVI Andrea Palladio para que se adecuara al gusto del siglo XVIII. Eran muebles bastante voluminosos, con profusión de frontones, cornisas, hojas de acanto y guirnaldas. El ebanista londinense William Vile, que trabajó para la corona en las décadas de 1750 y 1760, combinó el mobiliario clásico con otro de estilo rococó. Los diseñadores de sillas ingleses y estadounidenses son la excepción a la regla de la continuación del énfasis clásico. Los artesanos más populares de Londres diseñaron elegantes sillones con respaldos de madera, una forma básica diferente de las sillas con respaldos tapizados más comunes en Europa continental. Al principio, los respaldos se realizaron con listones macizos como soporte central, enmarcados por barrotes y rejillas curvados en una adaptación libre de las sillas chinas. Posteriormente, el marco adoptó forma de yugo y los listones centrales dejaron de ser macizos y se perforaron para representar mejor el espíritu rococó. Los diseñadores ingleses de mobiliario conocían muy bien las maderas. En el continente, los ebanistas estaban más preocupados por crear fantasías rococó, utilizando pintura cuando las taraceas y el oro molido resultaban demasiado caros.

El barroco

es un muy buen ejemplo de la arquitectura
barroca y un fino ejemplo de la pintura barroca.




El Barroco



El período Barroco se ubica entre los períodos Manierista y Rococó, aunque algunas definiciones llegan a incluir a ambos movimientos como parte del Barroco y, por ende, lo sitúan entre el arte del Renacimiento y el Neoclásico. Se enmarca en un tiempo en el cual la Iglesia Católica tuvo que reaccionar contra numerosos movimientos revolucionarios culturales que produjeron una nueva ciencia y nuevas formas de religión, como la Reforma protestante.
Se ha dicho que el Barroco en
arquitectura es un estilo que podría dar al papado un camino formal imponente de la expresión que podría restaurar su prestigio, al punto de hacerse de alguna manera simbólica de la Contrarreforma. Fue con éxito desarrollado en Roma, donde la arquitectura barroca renovó ampliamente las áreas centrales con la adición (o revisión) urbanística. Pero muchos otros ejemplos son encontrados en otras ciudades europeas y en America Latina. Es importante destacar que el Barroco fue una innovación cultural general.



Definición


La palabra barroco, como la mayor parte de las designaciones de un período, época o de un estilo, fue inventada por críticos posteriores, más que por los practicantes de las artes en el siglo XVII y principios de siglo XVIII, es decir, los artistas que plasmaban dicho estilo. Es una traducción francesa de la palabra portuguesa "barroco" (en español sería "barrueco"), que significa "perla de forma irregular", o "joya falsa". Una palabra antigua similar, "barlocco" o "brillocco", es usada en el dialecto romano con el mismo sentido, o también se le llama "barro-coco" todas ellas significando lo mismo.
El término "barroco" fue después usado con un sentido despectivo, para subrayar el exceso de énfasis y abundancia de ornamentación, a diferencia de la racionalidad más clara y sobria de la Ilustración (siglo XVIII ). Fue finalmente rehabilitado en 1888 por el historiador alemán de arte Heinrich Wölfflin (1864-1945), quién identificó al barroco como oponente al Renacimiento y como una clase diferente dentro del arte "elaborado".


El Barroco como movimiento cultura


El Barroco realmente expresó nuevos valores; en literatura es abundante el uso de la metáfora y la alegoría. Representa un estado de ánimo diferente, más cerca del romanticismo que del renacimiento, aún cuando es un movimiento que nace al mismo tiempo que este último en algunos países. El dolor psicológico del hombre, en busca de anclajes sólidos, se puede encontrar en el arte barroco en general. El virtuosismo fue investigado por los artistas de esta época junto con el realismo. La fantasía y la imaginación fueron evocados en el espectador, en el lector, en el oyente. Todo fue enfocado alrededor del Hombre individual, como una relación directa entre el artista y su cliente. El arte se hace entonces menos distante de las personas, solucionando el vacío cultural que solía guardar.
Cada una de las Bellas Artes tiene representantes en este movimiento cultural:
En música puede ser Antonio Vivaldi y Johann Sebastian Bach
En
literatura española se encuentran Luis de Góngora y Francisco de Quevedo y Villegas
En
pintura italiana están Pietro da Cortona, Caravaggio, y los Carracci
En la escultura italiana el exponente más célebre del barroco es
Bernini. En la escultura mexicana está representada por Jerónimo Balbás, etc.
En la
arquitectura Borromini
Tras la mesura del Renacimiento y el retorcimiento estético del manierismo, en la Roma de los Papas se advierte la necesidad de un arte nuevo. La independencia de las repúblicas italianas no es la de antaño, tras dos siglos de pugnas entre las potencias europeas por controlar su floreciente mercado centrado en el Mediterráneo. Por otro lado, el descubrimiento de América desplaza el polo económico hacia el Atlántico, cuyas rutas son dominadas por españoles, portugueses e ingleses. Esto provoca que las repúblicas italianas se reagrupen bajo un poder más fuerte y las que no caen bajo control extranjero (España y Francia) se someten a la influencia mayoritaria de Roma, más concretamente de los Estados Vaticanos, al más puro estilo de una teocracia. Para ejercer legítimamente este gobierno, las altas esferas eclesiásticas dominantes en Roma hubieron de depurar su corrupta cúpula gubernamental. Voces de descontento ya había desde hacía cincuenta años, y la Iglesia Católica se vio escindida por la Reforma luterana, cuyos teólogos, Juan Calvino, Ulrico Zuinglio y otros personajes, la acusaron de nepotismo y simonía. La necesidad de reformar las estructuras del mundo católico es lo que conduce al Concilio de Trento y a la mal llamada Contrarreforma, en realidad, una Reforma católica, que no va contra algo sino en busca de una adaptación a los nuevos tiempos. La traducción de este estado de cosas sobre el arte trae importantes consecuencias desde el primer momento. Los teólogos reunidos en el concilio, mayoritariamente españoles, proclaman ciertos dogmas que han de ser representados dignamente por los artistas al servicio de la Iglesia: la virginidad de María, el misterio de la Trinidad, entre otros, pasan a protagonizar los lienzos. La Iglesia, antes que las monarquías absolutistas que posteriormente ejercieron un poder paralelo al Vaticano, fue la primera en comprender el poder ilimitado del arte como vehículo de propaganda y control ideológico. Por esta razón contrata grandes cantidades de artistas, reclutando por supuesto a los mejores, pero también a muchos de segunda fila que aumentan los niveles de producción para satisfacer las demandas de la gran base de fieles. Se exige a todos los artistas que se alejen de las elaboraciones sofisticadas y de los misterios teológicos, para llevar a cabo un arte sencillo, directo, fácil de leer, que cualquier fiel que se aproxime a una iglesia pueda comprender de inmediato. Los personajes han de ser cercanos al pueblo: los santos dejan de vestir como cortesanos para aparecer casi como pordioseros, con rostros vulgares. El énfasis de la acción ha de colocarse sobre el dramatismo: la consigna fue ganar al fiel a través de la emoción. Las escenas se vuelven dinámicas, lejos del hieratismo intemporal de los estilos anteriores. Las composiciones se complican para ofrecer variedad y colorido. Las luces, los colores, las sombras se multiplican y ofrecen una imagen vistosa y atrayente de la religión y sus protagonistas. Fuera del patrocinio de la Iglesia, los mecenas privados se multiplican: el afán de coleccionismo incita a los pintores a llevar a cabo una producción de pequeño o mediano formato para aumentar los gabinetes de curiosidades de ricos comerciantes y alta nobleza.
En la época de los filósofos Bacon y Descartes, el arte se colecciona como los objetos científicos o los exóticos bienes importados de las Indias y América. La secularización de esta época propició que se revalorizaran géneros profanos, como el bodegón o el paisaje, que empieza a cobrar una autonomía inusitada. Las complejas composiciones del Barroco, la diversidad de focos de luz, la abundancia de elementos, todo, puede aplicarse perfectamente a un paisaje, tal y como puede verse en la Recepción del Embajador Imperial en el Palacio Ducal de Canaletto. El Barroco como estilo general es tan sólo una intención de base. Las formas que adopte en la praxis serán tan variadas como se pueda imaginar. Sin embargo, dos polos predominan, agrupados en torno a dos grandes figuras rivales en la época: Michelangelo Merisi da Caravaggio, que aglutina a los pintores del naturalismo tenebrista; y Annibale Carracci, que trabaja con su hermano y con su primo en un estilo clasicista.


Arquitectura


La arquitectura barroca se desarrolla desde el principio del siglo XVII hasta dos tercios del siglo XVIII. En esta última etapa se denomina estilo rococó. Se manifiesta en casi todos los países europeos y en lo que eran por aquel entonces los territorios de España y Portugal en América, hoy países independientes. El barroco se da también en otras artes, como Música, Literatura, Pintura y Escultura.

Abajo: Catedral de la Asunción en Valladolid en España


Escultura


La escultura barroca se desarrolla a través de las creaciones arquitectónicas, sobre todo en estatuas, y también en la ornamentación de ciudades en plazas, jardines o fuentes. En España también se manifestó en imágenes religiosas talladas en madera, en la llamada imaginería que esperaban despertar la fe del pueblo.

Abajo: escultura de un busto de una mujer en el arte Barroco


Pintura


Durante el Barroco la pintura adquiere un papel prioritario dentro de las manifestaciones artísticas. Siendo la expresión más característica del peso de la religión en los países católicos y del gusto burgués en los países protestantes.
Se desarrollan nuevos géneros como los
bodegones, paisajes, retratos, cuadros de género o costumbristas, así como se enriquece la iconografía de asunto religioso. Existe una tendencia y una búsqueda del realismo que se conjuga con lo teatral y lo efectista.

Abajo: pintura del arte Barroco " El Joven Mendigo"



Música


La música barroca es el estilo musical relacionado con una época cultural europea, que abarca desde el nacimiento de la ópera en el siglo XVII (aproximadamente en 1600) hasta la mitad del siglo XVIII (aproximadamente hasta la muerte de Johann Sebastian Bach, en 1750).

La tecnología de la edad media


Al lado: representacion gráfica de la tecnología de la epoca medieval para las construcciones arquitectonicas









La Tecnología de la edad media



El periodo histórico transcurrido entre la caída de Roma y el renacimiento (aproximadamente del 400 al 1500) se conoce como edad media. En contra de la creencia popular, se produjeron grandes avances tecnológicos en este periodo. Además, las culturas bizantina e islámica que prosperaron en esta época, tuvieron una importante actividad en las áreas de la filosofía natural, el arte, la literatura, la religión, y en particular la cultura islámica aportó numerosas contribuciones científicas, que tendrían gran importancia en el renacimiento europeo. La sociedad medieval se adaptaba fácilmente, y estaba dispuesta a adquirir nuevas ideas y nuevos métodos de producción a partir de cualquier fuente, viniera de las culturas del islam y Bizancio, China, o de los lejanos vikingos.


En el área de la guerra, se mejoró la caballería como arma militar, con la invención de la lanza y la silla de montar hacia el siglo IV; se desarrolló también la armadura más pesada, la cría de caballos más grandes y la construcción de castillos. La introducción de la ballesta, y más tarde de la técnica de la pólvora desde China, llevó a la fabricación de pistolas, cañones y morteros (a través del desarrollo de la cámara de explosión), reduciendo de este modo la efectividad de los escudos pesados y de las fortificaciones de piedra.




Una de las máquinas más importantes de la época medieval fue el molino, que no sólo incrementó la cantidad de grano molido y de madera aserrada, sino que también favoreció la formación de molineros expertos en manivelas compuestas, levas y otras técnicas de movimiento de máquinas y combinación de sus partes con otros dispositivos. La rueda de hilado, que se introdujo desde la India en el siglo XIII o XIV, mejoró la producción de hilo y la costura de la ropa y se convirtió en una máquina común en el hogar. El hogar, en sí mismo, también se transformó con la inclusión de una chimenea, que ahorraba la madera cada vez más escasa debido a la expansión agrícola. Hacia el año 1000, los excedentes agrícolas, debidos a varias mejoras en el arado, llevaron a un incremento del comercio y al crecimiento de las ciudades. En éstas se desarrollaron las innovaciones arquitectónicas de muchos reinos, para culminar en grandiosas catedrales góticas de altos muros, posibles gracias a los arbotantes.


Las innovaciones en el transporte durante la edad media ampliaron la difusión de la tecnología a través de grandes áreas. Algunos elementos como la herradura, el árbol de varas (para enjaezar de forma efectiva los caballos a los carros) y el coche de caballos aceleraron el transporte de personas y mercancías. Se produjeron también cambios importantes en la tecnología marina. El desarrollo de la quilla, la vela latina triangular para una mayor maniobrabilidad, y de la brújula magnética (en el siglo XIII) hicieron de los barcos veleros las máquinas más complejas de la época. El príncipe Enrique de Portugal creó una escuela para enseñar a los navegantes cómo usar correctamente estas máquinas.


Otros dos inventos medievales, el reloj y la imprenta, tuvieron gran influencia en todos los aspectos de la vida humana. La invención de un reloj con péndulo en 1286 hizo posible que la gente no siguiera viviendo en un mundo estructurado diariamente por el curso del Sol, y cada año por el cambio de estaciones. El reloj fue además una ayuda inmensa para la navegación, y la medida precisa del tiempo fue esencial para el desarrollo de la ciencia moderna.

La invención de la imprenta, a su vez, provocó una revolución social que no se ha detenido todavía. Los chinos habían desarrollado tanto el papel como la imprenta antes del siglo II d.C., pero esas innovaciones no alcanzaron demasiada expansión en el mundo occidental hasta mucho más tarde. El pionero de la imprenta, el alemán Johann Gutenberg, solucionó el problema del moldeo de tipos móviles en el año 1450. Una vez desarrollada, la imprenta se difundió rápidamente y comenzó a reemplazar a los textos manuscritos. De este modo, la vida intelectual no continuó siendo dominio de la Iglesia y el Estado, y la lectura y la escritura se convirtieron en necesidades de la existencia urbana.

martes, 4 de diciembre de 2007

el dibujo en el renacimiento

Abajo: imagen del Vituvio de Da Vinci a carbon






El dibujo en el Renacimiento




De la Edad Media, S.VIII-S.XV, es donde se conservan un numero mayor de obras integras. Durante esta etapa predomina las representaciones vivaces. Vuelve a imponerse la espectacularidad y los aderezos, sin dar oportunidad a actuar al color; simplemente es el trazo el encargado de marcar el detalle. La invasión árabe introduce un revolucionario soporte para el dibujo y la pintura: el papel. Invención china que facilitará que la ilustración deje se ser una actividad exclusiva de monjes sobre pergaminos de cañas y piel, para convertirse en algo más alcanzable para la población. Es a partir de ese momento cuando se puede manifestar el fulgor del color. Cabe destacar, también, la introducción al uso de la pluma metálica o la tinta como la conocemos actualmente.



Desde Italia y avanzando entre la etapa gótica, segunda mitad del S.XV, el Renacimiento se desarticula de lo religioso. Ahora lo importante es reconocer la belleza y saberla expresar. Basándose en la civilización artística grecorromana (renace lo antiguo), vuelve a imponerse lo natural y escueto. Los magnates se dejan reflejar sus bustos en multitud de retratos. De la mera decoración arrinconada, el desnudo femenino empieza a adueñarse de los temas principales en las creaciones y se vuelve al estudio de la figura humana. El dibujo asciende a lo volumétrico gracias a las nuevas técnicas de coloreado. El juego de luces y sombras, junto con la perspectiva, acerca aún más la realidad al dibujo. Una manifestación de artistas demuestran este nuevo desarrollo: el Greco, Miguel Angel, Sandro Boticelli, Leonardo da Vinci.Éste último destaca sobre los demás por su afán de investigación. Recoge bajo sus obras estudios de anatomía, invención de artilugios y una nueva manera de utilizar la iluminación en el dibujo. El esfumato disipa la línea cerrada del contorno del dibujo para aumentar de profundidad y con ello, lo que se persigue desde entonces: el acercamiento a lo natural. Por tanto el dibujo deja de ser algo espontáneo y subjetivo para convertirse en una verdadera disciplina.



El Barroco, que se estira hasta el S.VII, utiliza hasta la exageración todos los recursos aportados durante el Renacimiento para expresar desde la calamidad de la pobreza hasta lo fastuoso de la riqueza. Se rompe le rectitud y la uniformidad en las representaciones pictóricas y se intenta al máximo conmover y atraer al espectador.
A partir del S.XIX se rompe la continua uniformidad que había seguido el dibujo y se bifurca en multitud de estilos: romanticismo, realismo, impresionismo, expresionismo, fauvismo, cubismo, futurismo, surrealismo... No obstante, todos ellos utilizan lo aportado hasta la fecha como herramienta para expresar nuevos enfoques de la sociedad que están viviendo.